En la vida las cosas van sucediendo con cierta lógica y cierta casualidad. Van pasando los años y apenas nos paramos a pensar.
Como mujer madura tengo distintas facetas de mi vida en marcha pero hay una que es mi "proyecto" y esa es mi familia. En la familia cada uno cumplimos unos roles que se van modificando poco a poco según van cambiando las épocas y todo parece que funciona con cierta normalidad. Pero lo bueno de este gran proyecto es que cuando a uno de sus componentes le "falla" algo: salud, ánimo..... los demás son capaces de readaptarse de inmediato y poner en marcha un plan de emergencia para proteger a ése que está necesitado.
Este curso es un curso de muchos "movimientos" y para colmo a mí me ha dado por estar convaleciente cada dos por tres. Pues hay que ver a mis hombres organizando esta casa. No hacen ascos a nada y con mucho orgullo les hemos preparado para ser autónomos y ocuparse del otro cuando lo necesita. Mis hijos duermen como lirones, pero estos día en cuanto tosía un poco más fuerte ahí se presentaban para ver si necesitaba algo. Y no quiero olvidar al mejor enfermero-cocinero-lavandero.....del mundo, Javier!!
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