LAS FLORES DE BACH

La terapia floral de Bach se usa desde hace más de 60 años. Es un método natural que busca la curación a través de las esencias de ciertas flores silvestres. Eduard Bach desarrolla este método tras muchos años de práctica en medicina convencional y en homeopatía. Según Bach, mediante las esencias podemos acercarnos a un estado armónico de la personalidad y a la prevención de muchas enfermedades. En sus años de médico convencional fué dándose cuenta de que la causa de las enfermedades está siempre en nosotros mismos y que si nos ocupamos de ellas con seriedad, con nuestras propias fuerzas y nuestro autoconocimiento, y apoyándonos en la naturaleza curativa, podemos volver a estar sanos. Su objetivo prioritario no era eliminar los síntomas externos, sino la curación desde el interior. En su opinión la salud surge desde lo positivo del ser humano, que él llama "yo superior". Debemos desarrollarlo en nuestra vida, pero generalmente cae víctima de nuestra personalidad, formada por defectos humanos tales como la envidia, odio, miedo, orgullo, codicia.... En realidad son nuestros sentimientos y modos de conducta negativos y degenerados los que nos enferman.. No dejan sitio a las características positivas. Por eso hay que dejar crecer en el ser humano lo hermoso, sano y armónico., de modo que expulse de él lo enfermo y negativo. Salud significa un óptimo crecimiento físico psíquico y un despliegue armónico de la vida. Para ello tenemos que conocernos a nosotros mismos, en especial nuestras debilidades e incapacidades, y ser conscientes de ellos. Sólo así podemos establecer una comunicación entre cuerpo, espíritu y alma. Bach en sus largos años de actividad médica comprendió que la esencia de un ser humano puede conocerse mejor a partir de sus peculiaridades y modos de comportamiento que de su enfermedad corporal, y que sólo un método curativo basado en estos comportamientos es adecuado para el ser humano completo. Así pues, atendiendo a los modos de conducta, clasificaba a sus pacientes en treinta y ocho grupos. Bach pretendía que el alma del ser humano floreciera para que se propagara en él lo positivo y sano. Buscó remedios que pudieran curarle en su interior y le permitieran volver a sentir, pensar y actuar de una manera viva. Descubrió que entre determinadas características humanas y la expresión de ciertas plantas existe una comunidad interior: ASí trató que la fuerza a partir de la cual la planta desarrolla hasta completar sus aptitudes individuales, la transmitió a sus medicamentos, que pueden tener entonces en mismo efecto sobre las personas. Toda flor es una belleza y atractivo un símbolo de salud y alegría de vivir. En su inocencia y naturalidad es paradigma para nosotros. Pero, naturalmente, también nosotros podríamos ser bellos y cantar a la vida y actuar de manera constructiva en lugar de destructiva. Bach dividió sus remedios en siete grupos, en los que se reflejan las dos áreas principales de problemas para el ser humano: el dominio de su vida y el trato con los semejantes. Quería crear un método curativo que todo el mundo pudiese emplear sin riesgos. Pero para encontrar el remedio adecuado debe uno mismo contemplarse con gran franqueza hasta conocer bien claro cuales son sus sentimientos y su modo de tratar la vida.