Una de estas noches tuve un sueño con una persona muy especial y como son las cosas de la vida que esta mañana me suena el móvil y es ella......
A menudo las cosas llegan cuando ya no las esperamos: un gesto de cariño, una llamada, la solución de un problema..... Son situaciones inesperadas que no tienen una explicación lógica ni racional.
En nuestro día a día sabemos que por el exceso de tensión, de expectativas, muchas veces los resultados no son lo que nos esperábamos, la vida no fluye!
Por eso, muchas veces lo que deseamos llega cuando ya no lo esperamos con ansiedad, porque dejamos de molestar con una tensión excesiva. En el fondo estamos hablando de desapego, una de las leyes espirituales universales.
Según esta ley, para obtener cualquier cosa en el universo físico, debemos renunciar a nuestro "apego" a ella. Eso no significa que renunciemos al interés por el resultado. EL desapego es sinónimo de confianza. En cambio, el apego se basa en el temor y la inseguridad. Y desde aquí no podremos lograr nuevas relaciones, nuevos proyectos ni desde luego comenzar una nueva etapa vital.
Podemos empezar en nuiestro día a día, dejando de preocuparnos en la meta final sino disfrutando del proceso y nos daremos cuenta que con esta actitud surgen situaciones nuevas, personas que se cruzan inesperadamente.....todas nos ayudan a seguir por el camino adecuado.
Lo ideal es no aspirar a ideales exagerados. A grandes espectativas, grandes decepciones.
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