Aunque estemos en pleno invierno en Euskal Herria huele a primavera. ¡Día tras día rozamos los 20ºC y la naturaleza anda loca!. Ayer por la tarde subimos a la huerta la prioridad era la recolección de las coles de Bruselas que estaban a tope. Las coles las vamos limpiando y una a una admiten muy bien la congelación. Luego, a la hora de cocinar, se echan directamente al agua, se deja hervir y están maravillosas. Este año hemos conseguido muy buena producción.
Además recolectamos un montón de puerros, unos para casa y otros para regalar. Los he hervido con una pizca de sal y una vez templados los hemos comido con una buena vinagreta. ¡¡Mejor que los espárragos!!
Después corté una buena lombarda, la he cocido en la superrápida con un puerrito, la he escurrido y la he aliñado con semillas de sésamo y un poco de aceite de oliva, ¡buenísimo! ¡Y ya han empezado a salir los primeros espárragos trigueros, qué temprano! Los voy guardando en el frigo y cuando tengo una buena cantidad los cocino.
Por último he cortado un par de lechugas para hacer una buena ensalada. Con estas temperaturas hemos podido mantener la cosecha de lechugas a la intemperie durante todo el invierno. ¡¡¡Ah!!!! y se me olvidaban las un ramito de calas para colocar sobre la chimenea, flores frescas todo el año. ¡No está nada mal para ser un 13 de febrero!
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